El histórico líder del Cártel de Sinaloa, Ismael “El Mayo” Zambada, se declaró culpable en una corte federal de Brooklyn, Nueva York, de cargos relacionados con narcotráfico y crimen organizado, poniendo fin a más de cinco décadas de impunidad.
Durante la audiencia, el sinaloense de 77 años reconoció haber dirigido de manera continua una empresa criminal dedicada al trasiego de cocaína, heroína, metanfetaminas y fentanilo hacia Estados Unidos. También admitió que a lo largo de su carrera sobornó a policías, militares y políticos en México para garantizar la operación del cártel.
De acuerdo con los documentos judiciales, Zambada aceptó que el Cártel de Sinaloa movilizó más de 1.5 millones de kilos de cocaína y autorizó asesinatos de rivales y traidores a la organización. Además, se le impuso una multa estimada en 15 mil millones de dólares, equivalente a las ganancias ilícitas de la organización bajo su mando.
La declaración de culpabilidad representa un golpe sin precedentes contra uno de los narcotraficantes más longevos y discretos de México, quien nunca había sido detenido por autoridades mexicanas. La fiscalía estadounidense señaló que se trata de una “victoria histórica” en la lucha contra el crimen organizado.
El juez del caso fijó la sentencia para enero de 2026, y todo indica que Zambada enfrentará cadena perpetua obligatoria en una prisión de máxima seguridad de Estados Unidos.
Con este desenlace, se cierra un capítulo clave en la historia del narcotráfico en México, donde “El Mayo” había logrado mantenerse fuera del alcance de la justicia durante más de 50 años, consolidándose como una figura mítica dentro del Cártel de Sinaloa.