Ciudad de México. El gobierno federal anunció la suspensión de las importaciones temporales de calzado terminado, medida que entrará en vigor a partir de hoy, 28 de agosto de 2025 y que busca frenar la competencia desleal que enfrentaba la industria nacional. La decisión, publicada en el Diario Oficial de la Federación, elimina el beneficio del programa IMMEX para los productos comprendidos en las fracciones arancelarias 64.01 a 64.05, es decir, calzado terminado que ingresaba al país sin cubrir impuestos ni aranceles.
Con esta suspensión, el calzado terminado que ingrese al país deberá cubrir impuestos y aranceles, incluyendo un gravamen mínimo del 25%, lo que permitirá a las empresas mexicanas competir en condiciones más equitativas.
Entre 2021 y 2024, este tipo de importaciones creció de manera acelerada: 24 veces más en volumen y 12 veces más en valor. Muchas de esas mercancías no salían del país como establece el programa IMMEX, sino que se quedaban en el mercado interno, desplazando la producción mexicana.
Un respiro para la industria zapatera
Guanajuato, principal productor de calzado en México con más del 70 por ciento de la producción nacional, será el estado más impactado positivamente por la medida. Tan solo en 2024, la industria enfrentó una caída del 12.8% en su valor de producción y la pérdida de cerca de 11,000 empleos formales, afectaciones que se atribuyen, en buena parte, al incremento desproporcionado de importaciones temporales.
Analistas del sector estiman que esta medida podría detener la caída en la producción y abrir la puerta a la recuperación de empleos en el corredor zapatero del estado de Guanajuato, particularmente en municipios como León, San Francisco del Rincón y Purísima del Rincón, donde miles de familias dependen directamente de esta industria.
Además, la política busca cerrar la puerta al contrabando técnico, fortalecer la recaudación fiscal y continuar la consolidación de Guanajuato como motor nacional de la manufactura de calzado.